La Intergaláctica, un análisis de las relaciones transnacionales del Ejército Zapatista de Liberación Nacional
José Cervantes M.[1]
Resumen: El Ejército Zapatista de Liberación Nacional comprendió la importancia de una consciencia de la realidad internacional como estrategia de supervivencia. Por ese motivo el zapatismo llevó a cabo encuentros para facilitar el diálogo con actores internacionales y articuló instancias en su organización interna que dieran interlocución al movimiento con actores internacionales, como la Comisión Intergaláctica.
Palabras clave: zapatismo, Relaciones Internacionales, relaciones transnacionales, activismo.
Desde su origen, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (ezln) buscó crear redes de apoyo y difusión aprovechando la coyuntura tecnológica que vivía el mundo a finales del siglo xx, caracterizada por la proliferación de internet y otros medios de comunicación masivos. Además, todo esto se dio reconociendo la importancia de los actores internacionales en la legitimación de su lucha, como lo expresaron desde la Primera Declaración de la Selva Lacandona, con la que el Ejército se levantó en armas:
También pedimos a los organismos internacionales y a la Cruz Roja Internacional que vigilen y regulen los combates que nuestras fuerzas libran protegiendo a la población civil, pues nosotros declaramos ahora y siempre que estamos sujetos a lo estipulado por las Leyes Sobre la Guerra de la Convención de Ginebra… (Comandancia general del ezln, 1993)
Desde su nacimiento, el Ejército Zapatista se apoyó de redes de movimientos y activistas que le permitieron articularse con otras organizaciones afines, sin la necesidad de formar organizaciones jerárquicas. Así, el ezln conformó sus propias relaciones transnacionales,[2] elemento indispensable de su estrategia de supervivencia.
Sobre estas relaciones transnacionales, dice Camila A. Rojas Peña (2013) que el fenómeno de la globalización fue un eje central y el principal facilitador de la creación de una red transnacional de relaciones con actores sociales no Estado-céntricos. Esta red se forjó principalmente desde un frente contra el neoliberalismo y en favor de la humanidad, valores reproducidos por el ezln.
Por otro lado, Marie-Josée Massicotte (2015) señala que las relaciones transnacionales de incidencia política establecidas por el ezln se caracterizaron por mantenerse al margen de las instituciones políticas estatales. En su lugar, optaron por buscar la transformación del sistema político desde la sociedad civil y el cambio comunitario.
El ezln facilitó distintos encuentros para crear y comunicarse con estas redes de apoyo y articular comunicados con sus integrantes. De esos acuerdos surgió el “Primer Encuentro Intercontinental por la Humanidad y contra el Neoliberalismo”, que, derivado de la Primera Declaración de la Realidad, reunió a 3000 activistas en La Realidad en agosto de 1996. El encuentro se convocó para ser un punto de convergencia de la lucha contra la globalización, encarnada en el modelo neoliberal, como lo expresa la Primera Declaración de La Realidad, en 1996:
Contra la internacional del terror que representa el neoliberalismo, debemos levantar la internacional de la esperanza. La unidad, por encima de fronteras, idiomas, colores, culturas, sexos, estrategias, y pensamientos, de todos aquellos que prefieren a la humanidad viva. (Subcomandante Insurgente Marcos, 1996)
A este evento de gran escala, al que asistieron en su mayoría activistas de Latinoamérica, Europa y Estados Unidos, también, se le conoció como La Primera Intergaláctica. El encuentro permitió la formalización de una red articulada de ideas entre diversos movimientos, reconociendo siempre la particularidad de cada uno. Esto se refleja en la Segunda Declaración de La Realidad, emitida al término del encuentro: “es una red colectiva de todas nuestras luchas y resistencias particulares…”, “la red somos todos los que resistimos”, se señaló.
Es claro entonces, que el zapatismo es consciente de la esfera mundial y, desde su origen, actúa como agente de relaciones transnacionales. En 2005, el Comité Clandestino Revolucionario Indígena (ccri) revisitó su ideario respecto al mundo en el apartado III.- DE CÓMO VEMOS EL MUNDO de la Sexta Declaración de La Selva Lacandona. En este comunicado, el ccri reafirma la persistencia de la opresión sistemática proveniente del sistema capitalista neoliberal y se identifica con diversas comunidades alrededor del mundo que viven realidades similares. Asimismo, ve una oportunidad para resistir en conjunto y compartir la lucha desde el frente intelectual y civil.
Como resultado de la Sexta Declaración de La Selva Lacandona, se constituyó la Comisión Intergaláctica en noviembre de 2005. Esta comisión se encargó de los preparativos del Encuentro Intercontinental (sucesor del Primer Encuentro en La Realidad de 1996) y posteriormente coordinó los encuentros y enlaces internacionales organizados por el zapatismo. La Comisión Intergaláctica, encabezada por el teniente coronel Insurgente Moisés, se fundó con el objetivo de ofrecer interlocución entre el ezln y la sociedad civil internacional. El mayor Moisés, como fuera conocido durante el levantamiento militar en 1994, es uno de los principales actores políticos del zapatismo, desde su participación en la entrega del prisionero de guerra Absalón Castellanos.[3]
La Comisión Intergaláctica, siguiendo lo propuesto por el ezln en la Sexta Declaración, organizó el Encuentro Intercontinental. Su impacto se vio reflejado en la articulación de nuevos encuentros y mecanismos de solidaridad internacional. Destaca entre estos la Travesía por la Vida, Capítulo Europa, en 2021, cuya misión fue abrir el diálogo a las luchas vigentes y dar seguimiento a las redes de solidaridad. El comunicado “La Travesía por la Vida: ¿A QUÉ VAMOS?” lo expresa así:
Pero, ojo, consideramos que esa mirada crítica “outsider” es necesaria y vital, porque permite ver cosas que no se miran en el fragor de la lucha y, atención, aporta conocimientos sobre la genealogía de la bestia, sus transformaciones y su funcionamiento.
En fin, que queremos hablar y, sobre todo, escuchar a quien se ponga a modo. Y no nos importa su color, tamaño, raza, sexo, religión, militancia política o traspié ideológico, si es que coincide en el retrato hablado de la máquina asesina… (Galeano, 2021)
Es notorio que la conciencia del ezln sobre la realidad internacional ha sido crucial para su supervivencia. Su crítica y cuestionamiento hacia su propio lugar en el mundo le ha permitido crear vínculos genuinos con otros agentes, trascendiendo las fronteras nacionales. La propuesta de encuentros internacionales y la búsqueda de la audiencia extranjera han mantenido al ezln en la agenda político-social mundial, dando exposición a su lucha cotidiana. Esta constante exposición al público internacional ha obligado al Estado mexicano a mantener una postura razonable, pues ante los ojos del mundo cualquier otra postura sería inaceptable.[4]
La creación de la Comisión Intergaláctica y los encuentros internacionales organizados por el ezln han sido potentes demostraciones de la dimensión político-civil del zapatismo. Buscando superar las etiquetas de guerrilla y fuerza armada beligerante, estas iniciativas han sido muy útiles para dar a conocer a México y al mundo sus causas políticas y sociales profundamente arraigadas en el movimiento. Las iniciativas de diálogo del ezln han sido invaluables para la interlocución entre el movimiento, la academia y el activismo, permitiendo que investigadores, profesores y autores nutran sus ideas de la lucha zapatista y viceversa.
La Intergaláctica Zapatista nos invita a reconsiderar las relaciones transnacionales, presentando un modelo no-Estado-céntrico de activismo y acción política. Este enfoque, además de abogar por una profunda transformación del Estado, prioriza la participación comunitaria, la solidaridad y la revolución de la vida cotidiana. El contraste de este modelo con la realidad contemporánea resulta estremecedor.
En una era dominada por la diplomacia nacional, basada en una ciudadanía homogénea que busca enfrentar los conflictos emergentes desde la iniciativa del capital y las acciones gubernamentales, la propuesta de La Intergaláctica destaca por su singularidad. Apoyándose en el modelo zapatista, promueve una ciudadanía intercultural donde conviven comunidades indígenas con diferentes herencias, justamente representadas. Este enfoque fomenta el diálogo ciudadano y la acción comunitaria como estrategias frente a la opresión y las problemáticas particulares de cada comunidad.
Aunque la incidencia internacional del zapatismo aboga por una reforma de la ley no depende exclusivamente de esta para implementar cambios sustantivos en su gobierno y modelo económico. Se apoya en la autonomía para visibilizarse y cambiar la vida cotidiana de las comunidades.
La Intergaláctica demuestra la viabilidad de espacios de cooperación no-Estado céntricos que, más allá de las similitudes o diferencias culturales, se basen en la solidaridad. Estos espacios, sin necesidad de jerarquías, proponen cambios para la transformación de la sociedad sin que este cambio tenga que venir desde el Estado.
A 28 años del primer encuentro en La Realidad, las relaciones transnacionales del ezln han evolucionado. El movimiento mantiene una estrategia de comunicación a través de internet, desde su página Enlace Zapatista, el Subcomandante Moisés y el Subcomandante Marcos (ahora El Capitán) escriben sobre la realidad de las comunidades zapatistas.
La incidencia del ezln a nivel internacional ha disminuido, más no desaparecido. Los obstáculos enfrentados por las comunidades zapatistas les han obligado a priorizar sus políticas internas. Problemáticas como el crimen organizado han forzado a una gran cantidad de indígenas de Chiapas a migrar, lo que resulta en una disminución en la capacidad del ezln de operar de forma autónoma. Este hecho puede haber truncado cualquier creciente iniciativa de apoyo transnacional.
No obstante, en respuesta a estas problemáticas, el ezln mantiene cierto nivel de incidencia internacional. Ha llevado a cabo proyectos como la Travesía por la Vida, Capítulo Europa, en 2021, buscando abrir un diálogo con actores de dicho continente y, a la vez, despertar cuestionamientos y reflexiones al interior de México. En 2019, organizó el Encuentro de Mujeres que Luchan y el Foro en Defensa del Territorio y La Madre Tierra.
Estos encuentros e invitaciones al diálogo, además de recibir participaciones del interior del país, invitan a actores internacionales a relacionarse y a compartir sus vivencias en foros autónomos que se comparten a través de internet en Enlace Zapatista, además de ser divulgados y revisados por académicos.
Referencias
Comandancia General del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (1993). Primera Declaración de la Selva Lacandona. Enlace Zapatista. Recuperado de https://enlacezapatista.ezln.org.mx/1994/01/01/primera-declaracion-de-la-selva-lacandona/
Comité Clandestino Revolucionario Indígena Comandancia General del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (2005). Sexta Declaración de La Selva Lacandona. Enlace Zapatista. Recuperado de https://enlacezapatista.ezln.org.mx/sdsl-es/
Comité Clandestino Revolucionario Indígena-Comandancia General del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (1993). Sobre el Encuentro Intercontinental. Enlace Zapatista. Recuperado de https://enlacezapatista.ezln.org.mx/2005/11/26/sobre-la-intercontinental/
Galeano (2021). La Travesía por la Vida: ¿A QUÉ VAMOS? Enlace Zapatista. Recuperado de https://enlacezapatista.ezln.org.mx/2021/06/27/la-travesia-por-la-vida-a-que-vamos/
EstrategiaElectoral (2010). Salinas de Gortari -6 de enero 1994-.flv [video]. Youtube. Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=LoHFh2qWjYg&t=242s
Martínez Arias, Victor. L. (1993). Zapatismo, resistencia global y luchas locales en el Estado Español [Tesis de maestría, Universidad Internacional de Andalucía]. Recuperado de https://dspace.unia.es/handle/10334/71
Massicotte, Marie-Josée (2015). Las organizaciones civiles y sociales mexicanas en las redes transnacionales. Repositorio de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades. Recuperado de https://ru.ceiich.unam.mx/bitstream/123456789/3266/1/Organizaciones_civiles_hoy_web_Cap13_Las_organizaciones_civiles_y_sociales_mexicanas.pdf
Nye, Joseph S. y Keohane, Robert O. (1971). Transnational Relations and World Politics: An Introduction. International Organization, 25(3), 329-349. Recuperado de https://doi.org/10.1017/s0020818300026187
Rojas Peña, Camila A. (2029). Incidencia de la diplomacia paralela implementada por el Ejército Zapatista de Liberación Nacional en la creación de redes transnacionales de apoyo (1996 – 2006) [Tesis de pregrado, Universidad Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario, Bogotá.
Tribunal de Justica Zapatista (20 de enero de 1994). CONCLUSIONES DEL JUICIO POPULAR seguido para establecer responsabilidad del señor general de división Absalón Castellanos Domínguez. Enlace Zapatista. Recuperado de https://enlacezapatista.ezln.org.mx/1994/01/20/conclusiones-del-juicio-popular-seguido-en-contra-del-prisionero-de-guerra-de-nombre-absalon-castellanos-dominguez-general-de-division-del-ejercito-federal-mexicano/
[1] José Cervantes es originario de San Andrés Cholula, Puebla y estudiante de cuarto año de la licenciatura en Relaciones Internacionales por la Universidad Iberoamericana de Puebla. Aspira a enfocarse en el estudio de movimientos sociales y cultura moderna latinoamericana. Entre sus ocupaciones también está la fotografía. ORCID: 0009-0006-0941-2839. Este texto forma parte de una serie de análisis y reflexiones en el marco de la asignatura de Seminario de Investigación en Relaciones Internacionales. Extiendo mis agradecimientos particulares al Dr. José Cervantes Sánchez y a la Dra. María Eugenia Sánchez Díaz de Rivera, de la Universidad Iberoamericana, Puebla, por sus sugerencias de bibliografía y múltiples conversaciones para revisar propuestas y guiar el análisis que conforma este texto.
[2] Keohane y Nye (1971): relaciones entre dos o más actores a través de fronteras nacionales, en las que participa al menos un actor no-estatal.
[3] Absalón Castellanos Domínguez fue general de división del ejército mexicano y gobernador del Estado de Chiapas (1982-1988). El 1 de enero de 1994 un grupo comandado por el mayor Moisés lo aprehendió en el municipio de Las Margaritas. Posteriormente, el ccri comunicó que se le retenía en condición de prisionero de guerra, en espera de un “juicio popular”. Más tarde, se comunicó que se le encontró culpable de delitos en perjuicio de los indígenas de Chiapas, cometidos durante su administración (Tribunal de Justicia Zapatista, 1994). Finalmente, el ezln anunció que sería liberado en muestra de disposición y buena fe para aliviar las tensiones con el gobierno mexicano. Fue entregado al arzobispo Samuel Ruiz y al comisionado Manuel Camacho el 16 de febrero de 1994.
[4] En los primeros días posteriores al levantamiento, la postura del gobierno mexicano fue tajante, enmarcando el levantamiento como un conflicto interno que no representaba el sentir de los chiapanecos. Llamaron a los zapatistas “profesionales de la violencia” (Estrategia Electoral, 2010), sin llegar a reconocer al ezln como una fuerza beligerante. Sin embargo, bajo la presión internacional, la postura del gobierno se tornó más cauta: se nombró a un comisionado para la paz con el objetivo de facilitar el diálogo y se presentó un proyecto de ley de amnistía a través del presidente Salinas de Gortari. A pesar de estos gestos, las acciones del gobierno no contribuyeron a la desescalada del conflicto; por el contrario, reforzaron sus posiciones militares en Chiapas y violaron el cese al fuego acordado en febrero de 1994.